lunes, 30 de enero de 2012

La tumba de Dracula: El hijo de Drácula es un superhéroe

Con el Tomb of Dracula #45 (1976) comienza el tramo que considero más apasionante de la colección. Drácula se hace pasar por el mismísimo Diablo ante el culto satánico liderado por Anton Lupenski, que le ofrece a Domini como esposa. Como consecuencia de este matrimonio nace un bebé que, mediante un concurso que comienza en el TOD#50, iba a ser bautizado con el nombre que decidiesen los lectores. Lo cierto es que ninguno de las propuestas convenció a Wolfman (algunas de éstas son Delphi, Melvin, Furd, Harry, Jesús, Adam, Judas, Marvin, Mihnea, Mars, Nicholas, Abraham, Caesar, Adrian, Viktor, Adana, Vladon, Tyrone, “el hombre de Vlad”…), pero finalmente aceptó a Paul Kriksciun como ganador por el nombre “Gideon”, que recaería en el protagonista del TOD#57. En esta secta diabólica surgirán intrigas y luchas de poder entre Drácula y Lupenski para conservar el liderazgo del grupo, una situación que acabará teniendo inevitables consecuencias dramáticas.

El ganador del concurso recibió este dibujo como premio

El TOD#50, por cierto, es uno de los cómics de Drácula más extravagantes. No importó que desde el primer número la mayoría de los lectores se opusiesen a que en esta serie apareciese algún superhéroe, Wolfman decidió enfrentar a Drácula contra nada menos que el cósmico Estela Plateada, heraldo de Galactus, el devorador de planetas. En cierto modo el cruce tiene sentido al ser Estela Plateada un representante puro del bien cuyo principal villano es precisamente un demonio, Mefisto. Fuese correcta o no su aparición, lo interesante es que de este modo se consiguió atraer y enganchar a un gran número de lectores que no conocían esta colección y que quedaron impresionados con su calidad.

Estela Plateada contra Drácula, nadie se lo hubiese esperado

El nacimiento de Janus, que es como acabaría llamándose el hijo de Drácula y Domini, tiene lugar en Nochebuena dentro de un establo. La obvia metáfora acaba con un trepidante número en el que este bebé es convertido por el mismísimo Dios en un superhéroe luminoso con la misión de matar a su padre. La trama deja a los lectores con el corazón en un puño al ver pasar a Drácula de la satisfacción de haber formado una familia a la desesperación y la rabia de perder un hijo. El nombre del personaje, además de tener cierto parecido con el de Jesús, es el nombre del dios romano de las dos caras, la dualidad de los opuestos. De este modo, Janus comienza como el descendiente del mal en su máximo exponente para ser transformado después en un emisario de todo lo bueno.

Drácula contra otro ser luminoso, Janus

Por otro lado, llegó por fin el inevitable encuentro entre Hannibal King y Blade, que lucharían juntos contra el vampiro que había convertido su vida en un infierno, Deacon Frost. Los personajes pasan de la inicial y previsible desconfianza mutua a una amistad inquebrantable durante la lucha contra el vampiro “del pelo blanco peinado hacia atrás y los ojos infernales”, que es capaz de clonar un ejército de duplicados malignos, doppelgangers, de la pareja perseguidora.

El cazavampiros contra el cazavampiros-vampiro.

Continúa en: Gene Colan abandona la Tumba… varias veces

1 comentario:

superdiscochino dijo...

Me encantan estos artículos.
Dan muuuchas ganas de releer la serie.

Un saludo.