En primer lugar, una comparación entre viñetas de Tonton Placide, un álbum del personaje Benoît Brisefer creado por Peyo (el dibujante de los Pitufos). Después, una comparación de las contraportadas de los álbumes de Mortadelo y Filemón, y los de Gil Pupila (de Tillieux).
Jeje, lo de Tonton Placide, es prácticamente un Copy paste. Nada reprochable a mi entender, tantas páginas a la semana y tantas exigencias hacen que uno se busque la vida como pueda, que con el pan no se juega.
ResponderEliminarEs un poco la pena de Ibáñez: es un autor profesional que simplemente hace un trabajo. Gags eficaces y punto. Cualquier cosa vale, incluso sacar viñetas de cómics franceses.
ResponderEliminarTampoco fue el único entonces, ni ahora (en internet se pueden encontrar casos de dibujantes actuales que "se inspiran" demasiado de otra gente), pero sigue siendo un borrón en su carrera. Y es interesante documentarlo, que no parezca que no nos hemos dado cuenta.
Yo me quejo incluso de que El Hormiguero copie chistes de Cómo Conocí a Vuestra Madre o anuncios de seguridad vial americanos, no hago distinciones.
Nada. Que te citan en la cárcel : http://blog.adlo.es/2011/04/folch_rocks.html
ResponderEliminarMe he hecho gracia por lo de Benoît Brisefer.
Coincido con el comentario de arriba. Cuando uno no sabe cómo dibujar algo, recurre a otros profesionales, cómo lo han hecho ellos, y hasta cierto punto lo copia (a mí me ha pasado, aunque mi caso es diferente porque yo no he publicado nada...) Veo más el plagio en copiar la historieta o el chiste.
ResponderEliminarPero es interesante ver estos casos, estas similitudes. Gracias por hacernos disfrutar.